SENTIR, SENTIR, SENTIR…
CONFIAR Y ACEPTAR LO QUE SOMOS, TAL CUAL, ES LA OPORTUNIDAD
PARA TRANSFORMAR LO QUE NO NOS GUSTA O NO VEMOS.
Cuando entramos en los espacios y resortes conocidos es el
momento de respirar, tomarse unos instantes de calma para sentir, para cambiar
el rumbo. Este mecanismo de respuesta pertenece al pasado, nos fue bien en su
momento, démosle las gracias y dejémoslo marchar. Ahora tenemos otras
posibilidades, nos conocemos mejor y sabemos el motivo que se escondía detrás
de la reacción/respuesta.
Por otra parte, al reconocer que nos queda mucho trabajo para
hacer, es un atisbo de conciencia. Empezamos a conectar con nuestra realidad,
dejamos el mundo de la ficción de lo que quisiéramos o creemos ser. Si le
añadimos un poquito de sal al pensamiento, (cuyo aderezo es la observación) ya
hemos dado otro paso más
.
Dejar el drama, la interpretación, la identificación con el
personaje y RECORDAR que no somos el personaje, no somos el sentimiento, no
somos la emoción y no somos el pensamiento.
Hay una fuerza o una luz que nos atraviesa y nos conduce a
investigar lo que vivimos para profundizar en el conocimiento, para hacer
conciencia.
En los momentos críticos aparecen los automatismos conocidos
y ayudan a RECORDAR QUIENES SOMOS.
Si aparece una emoción/sentimiento/pensamiento, recordar y
decir:
YO NO SOY ESTA EMOCION,
YO NO SOY ESTE SENTIMIENTO,
YO NO SOY ESTE PENSAMIENTO.
¿QUÉ QUIERO DESCUBRIR? ¿QUÉ HAY DETRÁS DE ESTO QUE SE
PRESENTA EN ESTE MOMENTO?
¿QUIÉN SOY YO?
Dice Antonio Blay:
Pregunta: L’angoixa, és
dóna amb la mateixa intensitat en Tothom?
Resposta: Sembla que en algunes persones es dóna amb una
intensitat más gran; la intensitat será gran com més gran hagi estat la
radicalització de la desconnexió del fons i llavors és més gran la impressió de
sentir-se desemparat i això admet molts graus.


No hay comentarios:
Publicar un comentario