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Núria Argany te ofrece la posibilidad de conectar con tu esencia, lo que verdaderamente eres, haciéndote consciente de tu personaje, reconociendo tus proyecciones y resistencias a través de técnicas-terapias corporales, psicológicas y energéticas, recobrando el equilibrio, la armonía y la paz interior.

Núria Argany se ha formado a través de:

Seitai, Meditación Zen, Psicología, Terapias Naturales y Energéticas, Preparación al Parto Consciente, Ito-Termi, Sueños, Oligoelementos, Dietética, Formas-Pensamientos, Regresiones, RMF-Balacing, Tachyon, Ataraxia, Curación Cuántica, y Reconnective Healing.



sábado, 28 de abril de 2018

Siguiendo con la investigación del personaje



Cuando hemos logrado la comprensión del mismo, hemos de estar atentos, seguir observando porque siempre está alerta para ser el protagonista. Nos hace dudar, volvemos a las antiguas posiciones de pensar que los demás son los culpables y creemos que no hemos avanzado nada y nos cuestionamos la validez del trabajo.

El personaje o la personalidad es muy astuta; sin cesar conspira para recobrar su lugar de dueña, y en cuanto nos falta un poco de luz, de lucidez y de vigilancia, se desliza, mina el terreno y triunfa: de nuevo estamos a su merced.

En la vida interior ocurre lo mismo que en los países cuando se hallan en guerra, uno sale vencedor y el otro debe someterse… sin embargo esta situación no es segura para siempre, el pueblo vencido no acepta la derrota, refunfuña y trabaja en la sombra para liberarse.

No se consigue sojuzgar a la personalidad para siempre, ésta permanece viva y continúa haciendo un trabajo subterráneo, no capitula nunca. Para mantenerla en el lugar que deseamos, hay que estar siempre vigilantes, lo cual resulta agotador. Pero ella es tan tenaz, tan persistente que si nos distraemos vuelve a ocupar el primer lugar.

El personaje siempre está presente en nosotros, en nuestras memorias celulares por lo tanto sólo la absoluta atención y entrega consciente nos va liberando poco a poco de nuestros hábitos y maneras de reaccionar.

¿Qué hace un país en tiempos de guerra? Buscar aliados, es algo instintivo. ¿Cuál es nuestro aliado? Nosotros solos somos demasiado vulnerables y debemos buscar aliados que luchen por nosotros. La única solución es buscar a las entidades celestes, con los ángeles, arcángeles, divinidades… y darles a ellos la posibilidad de hacer la guerra…  Pues únicamente el Cielo, es decir el lado divino en nosotros, tiene todos los poderes, todos los medios, mientras que nosotros, ¿qué somos para osar hacer frente y resistir las energías oscuras o a la sombra?

Cuando estamos unidos a nuestra esencia, a nuestra Presencia al  Yo Soy todo el trabajo es mucho más fácil, ligero porque la personalidad queda en un segundo lugar, se ve obligada a obedecer. Ya no puede rebelarse.

E incluso cuando hayamos conseguido domar nuestra personalidad para remplazarla por la individualidad, ello no quiere decir que vaya a desaparecer completamente: conservará algunas raíces en el cuerpo físico, porque el cuerpo físico es el último refugio de la personalidad. Incluso cuando ya no quedan emociones ni pensamientos, aún mantiene sus bases en el cuerpo físico.

El cuerpo físico renueva sus células cada siete años y nosotros seguimos haciendo lo mismo de siempre a no ser que hayamos trabajado con intensidad y hayamos logrado la conciencia total de nuestras creaciones, hábitos, creencias, adicciones… reconociéndonos como creadores.
 
Para conseguir eliminar las memorias ancestrales de nuestra personalidad que quedan ancladas en el cuerpo físico debemos contar con la ayuda de Nuestro Ser Superior o las entidades celestiales. De lo contrario nos perderemos en el intento.
        

                  

¿Comprendéis un poco el trabajo que estamos realizando?

Hemos de confiar, no dudar en las experiencias y trabajos realizados y la total entrega nos liberará para siempre de las dudas y las confusiones que aparecen en nuestra mente y en nuestro inconsciente.

 


¿Cuál es el cimiento de la Meditación? El cimiento de la meditación se basa en una relación científica y sensata con el cuerpo y la mente; entonces, la armonía entre ambos crea una relajación; en esa relajación, en ese cese de actividad mental, la energía se acumula en su propia fuente. Empieza a accionar sobre nosotros. No tenemos que accionar sobre ella: ella empieza a accionar sobre nosotros, no hemos de hacer nada.

Silencio/Meditación.

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