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Núria Argany te ofrece la posibilidad de conectar con tu esencia, lo que verdaderamente eres, haciéndote consciente de tu personaje, reconociendo tus proyecciones y resistencias a través de técnicas-terapias corporales, psicológicas y energéticas, recobrando el equilibrio, la armonía y la paz interior.

Núria Argany se ha formado a través de:

Seitai, Meditación Zen, Psicología, Terapias Naturales y Energéticas, Preparación al Parto Consciente, Ito-Termi, Sueños, Oligoelementos, Dietética, Formas-Pensamientos, Regresiones, RMF-Balacing, Tachyon, Ataraxia, Curación Cuántica, y Reconnective Healing.



lunes, 16 de marzo de 2015

UN SUEÑO DENTRO DE UN SUEÑO

 Edgar Allan Poe

 

Toma este beso en tu frente
Y, ahora despidiéndome de ti,
Así mucho tengo que confesar—
No está equivocado, quien estima
Que mis días han sido un sueño;
Aún si la esperanza se ha volado
En una noche, o en un día,
En una visión, o en ninguna,
¿Es por eso menor la ida?
Todo lo que vemos o parecemos
Es solo un sueño dentro de un sueño.
Me paro entre el rugido
De una orilla atormentada por las olas,
Y tengo dentro de mi mano
Granos de la dorada arena—
¡Cuán pocos! aun como se arrastran
A través de mis dedos a lo profundo,
Mientras lloro-¡mientras lloro!
¡Oh Dios! ¿no puedo asirlos
Con más fuerza?
¡Oh Dios! ¿no puedo salvar
Uno de la despiadada ola?
¿Es todo lo que vemos o parecemos
Solo un sueño dentro de un sueño?





…Tendré que dejar de ver tantos programas de televisión… ¡Últimamente, entre sueño y sueño, me sale publicidad!
                                                                                Perich

Mientras soñamos, la información proviene de la memoria y no del exterior; los modelos creados se basan entonces en nuestras expectativas y perjuicios sobre el mundo. Lo que de día es una percepción distorsionada por las expectativas, de noche es una imagen metafórica, dramática y exagerada que muestra cómo nos sentimos ante un objeto, persona o circunstancia.
Soñar nos permite aprender a comportarnos en situaciones nuevas. Cuando se nos presenta un conflicto que no sabemos resolver, soñamos con él hasta que encontramos mecanismos para afrontarlos adecuadamente. A pesar de la indefensión de la parálisis y del desgaste energético que produce el sueño REM, la evolución nos ha dotado de esta capacidad por ser un instrumento mental de entrenamiento y simulación de la realidad, necesario para la supervivencia en un mundo cambiante y complejo. La evolución nos ha dado un taller nocturno de resolución de conflictos: los sueños.
Los tres estados de conciencia a los que la ciencia actual conoce como estado despierto, sueño REM o paradójico, y sueño ortodoxo o SOL (Sueño de Ondas Lentas). Por la noche, cada noventa minutos, tenemos un nuevo ciclo de sueño en el que, por término medio, los primeros setenta minutos son de sueño SOL (superficial, sería como sacar el pie del acelerador y empezar a relajar) y loa veinte de sueño REM. En éste aparecen los sueños, actividad intensa y rápida de la corteza cerebral acompañada de una parálisis muscular. Así mismo los movimientos rápidos de los ojos. Se desencadena cada 90 minutos (ritmo ultradiano), el locus cerúleos o Lugar Azul de la protuberancia. Un minuto antes de empezar el período de sueño, este núcleo cerebral da la orden mediante unas descargas que “iluminan la pantalla de cine” de la corteza cerebral occipital.
Del Lugar Azul salen tres fascículos: 1) “Cámara, Acción” o la noradrenalina (Sistema Reticular), 2) Un argumento emocionante emocionante (Corteza Cerebral) y 3) ¡No hay que correr peligro, sólo es una película! (Área Prefrontal).
La actitud de intentar comprender algo que ocurre y buscar una reacción adecuada es el nivel cognitivo más alto; la acción intencional y libre. Ésta permite distanciarse de la situación y reflexionar sobre posibles métodos alternativos de acción, permite romper la compulsión del hábito emotivo, realizar una acción deliberada en concordancia con un ideal, con un objetivo, y responder creativamente… ¡Tanto en la vigilia como en el sueño!
El sueño lucido no es una mera anomalía del estado onírico sino una poderosa “función adaptadora”, el producto más avanzado de millones de años de evolución biológica. Dormimos para soñar y soñamos para aprender a vivir de una forma cada vez más consciente y libre. Cada vez que en sueños nos damos cuenta de que estamos soñando, damos un paso en el territorio desconocido del futuro de la humanidad.
Un  sueño lúcido es una experiencia que demuestra claramente el hecho extraordinario de que el mundo que vemos en un momento dado puede ser una construcción de nuestra mente.
Este concepto tan difícil de aceptar es el punto clave de todas las místicas que en el mundo han existido. El sueño lúcido puede hacer que nos planteemos muchas preguntas, aunque nuestro interés en la lucidez sea mundano. Por otra parte, la lucidez en sí misma, como estado de conciencia, nos puede encaminar a las llamadas “experiencias transpersonales”.
 Un libro muy interesante sobre este tema de los sueños es El yoga de los sueños de Namkai Norbu que nos ofrece instrucciones para desarrollar la claridad mental en la vigilia, el dormir y el soñar. Para el Dzogehen la vida es realmente un sueño. En su búsqueda de la iluminación es fundamental atravesar la etapa de trabajo con los sueños lúcidos, aunque teniendo presente que lo importante de los sueños es dejar de tenerlos. Según el yoga tibetano del sueño, para llegar a disolver los sueños hace falta no apegarse a ellos ni de día ni de noche y considerarlos carentes de realidad.
Los comentarios anteriores han sido sacados del libro El sueño lúcido de la Dra. Consuelo Barea. Está agotado. Lo van a reeditar.
En los sueños todos los personajes que salen son partes de nosotros mismos, el inconsciente nos envía los mensajes mediante personas que podemos identificar más fácilmente para reconocer aquellas partes que nos ignoramos. Cada sueño nos aporta información de nuestro inconsciente, del momento que estamos viviendo y de acuerdo con lo que podemos afrontar. Cuando un problema no lo hemos resuelto, cuando no hemos acabado de “digerir” una situación, aunque sea del pasado y ya no se pueda cambiar la realidad, cuando no hemos aceptado o integrado partes de nosotros mismos, cuando no permitimos que aflore un deseo, los sueños nos presentan todo esto en forma de historias increíbles en las que nos enfrentamos al conflicto una y otra vez hasta resolverlo. Igual sucede con imágenes repetidas o secuencias cortas…  es un aviso de que hay algo que necesito hacer consciente.
El sueño es un regalo para nuestro trabajo y proceso personal, sólo nos pide lo mismo que en la vigilia, atención, observación y conciencia.
¿Recuerdas tus sueños? ¿Sueñas en blanco y negro o en color? ¿Cómo es tu mundo onírico? ¿Qué conflicto principal hay en tus sueños? ¿Qué obstáculos encuentras en el camino? ¿Cómo te sientes al despertar?
El cine nos habla de los sueños, películas como Abre los ojos,  Matrix y Origen nos hablan del funcionamiento de la mente onírica con mucha más precisión que los tratados sobre sueños. En estas películas de ciencia-ficción el protagonista descubre que en realidad está soñando o en el tercer caso prefiere quedarse en una situación creada por él mismo.



En cuanto a la muerte ¿Qué es? ¿Un paso intermedio? ¿La desaparición del cuerpo físico? ¿Otro estado de conciencia?
 Mircea Eliade soñó: “Me vi a mi mismo en el Ganges, un bote que yo conocía muy bien me esperaba para llevarme al otro lado. Cuando estuve en el bote ya no lo reconocía. Atado a él, a su lado había otro bote en el que yo no había reparado al principio, y del que no podía distinguir ni las formas ni las dimensiones.
Casi sin darme cuenta, pasé de mi bote al otro bote misterioso. De repente comprendí; todo se hizo extraordinariamente claro y simple, todo: la vida, la muerte, el significado de la existencia. Incluso mayor que esta revelación fue mi sorpresa: ¿Cómo nadie en la tierra había entendido antes todavía esto, tan simple? La muerte, eso era la cosa extraordinariamente simple y obvia. Tuve entonces la sensación de que se me había comunicado un mensaje, sobre la obviedad y simplicidad del más allá de la muerte, que yo tenía que recordar y comunicar a las otras personas. Me desperté con esa idea en mi mente: no olvides lo que has visto. Un segundo después lo olvidaba”.
Rendirse a lo que consideres sagrado es lo más importante para disfrutar de la vida. Para cada persona es distinto el concepto de lo sagrado: un agnóstico puede creer en la vida, un budista en su naturaleza propia y un cristiano en Cristo. ¿Hay para ti algo sagrado? Tanto en los sueños, la meditación, la vida y la muertes la clave es la entrega/rendirse.
Los grandes maestros nos hablan: Ramana Maharshi “En realidad, lo que se llama mundo no es más que pensamiento. No se obtendrá la realización del Ser mientras el mundo se siga considerando real. Cuando la mente, que es la causa de todo el conocimiento y de todas las acciones, se aquiete, el mundo desparecerá”.
Castaneda: “El tonal es completamente todo lo que somos. ¡Nombra cualquier cosa! El tonal es todo eso para lo cual tenemos palabras. Y como el tonal está hecho de sus propios hechos, todas las cosas, por lo visto, tienen que caer bajo su dominio…”. (Relatos de Poder).
Recuerda: Vida y muerte es una misma cosa. Para vivir plenamente sólo necesitamos aceptarnos como somos, entregarnos y rendirnos al absoluto.
¿La vida es un sueño? ¿La vida es un sueño dentro de un sueño? ¿Dónde se encuentra la realidad, en la vigilia ó el soñar? ¿Dónde vivimos en total consciencia?


El infinito parece tan interminable; seguro que me pierdo en él.
Sólo puedes perderte si eres una forma. Las formas se perciben en ti… lo sin forma.
Si eres lo que no tiene forma, ¿dónde podrías perderte exactamente cuándo careces de límites?
                                                       Mooji – El latido de lo absoluto -













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